Un Código Electoral para el país

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En el año 2011 la Jun­ta Central Electoral, ante la nece­sidad de actualizar nues­tro régimen electoral a los nuevos tiempos, ela­boró junto a la Organi­zación de Estados Ame­ricanos un proyecto de ley que modifica la Ley 275-95 que era la única norma electoral vigente hasta ese momento, en la que proponen grandes avances y fortalezas al sistema electoral domini­cano.

Luego de ser envia­do al Congreso y agotar una larga estadía en las cámaras legislativas, sur­gen dos proyectos que, luego de muchas discu­siones y participación de los actores sociales, las or­ganizaciones políticas con representación en el po­der legislativo acordaron aprobar. Surgiendo así las leyes de 33-18 de Par­tidos Políticos y la 15-19 de Régimen Electoral pro­mulgadas en los años pre­electorales 2018-2019, respectivamente.

Estas normativas fueron sometidas por reconocidos juristas al escrutinio cons­titucional bajo el alegato de que en su interior es­tas leyes contemplan faltas a la Carta Magna. En ese sentido, el pleno del Tribu­nal Constitucional declaró artículos de ambas piezas inconstitucionales y orde­nó su eliminación.

En los procesos elec­torales del año 2020 fue cuando realmente se so­metió a prueba nuestro nuevo régimen electoral, evidenciando en la prác­tica sus fortalezas, pero también debilidades que, con urgencia, deben ser enmendadas. En ese senti­do, precisamente la OEA y la UNIORE presentaron a la Junta Central Electoral un informe sobre nuestras elecciones de 2020 en el que sugieren la modifica­ción de las leyes de Parti­dos Políticos y de Régimen Electoral.

Este informe fue estu­diado por los titulares del órgano rector electoral que preside el magistrado Roman Jaquez Liranzo y designaron una comisión coordinada por el titular de la JCE Samir Chami Isa e integrada por un equi­po de profesionales con la tarea de revisar las men­cionadas leyes y presentar las propuestas de modifi­caciones de ambos textos normativos.

El lunes 30 de agosto en la apertura del diálogo na­cional que convocado por el presidente en el Conse­jo Económico y Social a propuesta del Foro Perma­nente de Partidos Políticos de la República Dominica­na se planteó incluir den­tro de las reformas a dis­cutir también una reforma electoral en adición a las planteadas por el el presi­dente Luis Abinader. Dicha propuesta consiste en fu­sionar en un código en un código todas las legislacio­nes que regulan nuestro país en materia electoral con el fin de evitar contra­dicciones entre una y otra haciéndolas eficientes evi­tando contradicciones en­tre sí.

Este planteamiento im­pacto de manera positiva en la sociedad dominicana ya que es verdaderamen­te necesario poder contar con un instrumento jurí­dico que otorgue reales herramientas de control eficaz a la institución ad­ministradora de nuestros procesos electorales, de claridad y facilite las deci­siones de quienes dirimen los conflictos electorales, permita la puesta en fun­cionamiento de la fiscalía electoral, pero sobre todo de lineamientos claros a los partidos políticos y les permita apostar dia a dia a su fortalecimiento.

Esperamos que de estas discusiones en las que par­ticipan todos los sectores de la vida nacional, se con­solide la idea de un Código Electoral para la República Dominicana que dé mayor fuerza a nuestras institu­ciones, brindándonos un adecuado funcionamien­to del sistema electoral, lo que constituye una garan­tía para el fortalecimiento y desarrollo de nuestra de­mocracia.